domingo, 9 de junio de 2013

En defensa de la Revolución Bolivariana

En defensa de la Revolución Bolivariana

A todas las organizaciones comprometidas con la Revolución Venezolana


En los últimos meses se ha visto como, con la muerte de Chávez, los sectores más reaccionarios han intentado minar las conquistas de la Revolución.

Conquistas no sólo importantes para el pueblo venezolano, sino también para la clase obrera española. Éstas representan un camino para construir una alternativa. La expropiación bajo control obrero de las fábricas y empresas que, por capricho de sus anteriores propietarios, cerraban. La mejora en el acceso  a la universidad y la reducción del analfabetismo. Todas estas conquistas ya representan un gran paso para un país como Venezuela. Pero también, especialmente en el control obrero, representaría un gran paso en nuestro país donde los empresarios nos venden que la única forma de salir de la crisis es con recortes.

Más de lo mismo. También, los mismos que apoyaron el golpe de 1936, también decían lo mismo. Decían que la única forma de que España “progresara” era con recortes sociales contra la clase obrera.
Es sorprendente ver que, autores que dicen trabajar por una República de Trabajadores en nuestro país, estén ahora escribiendo a favor de la reacción:

“El gobierno venezolano usó los recursos del Estado para hacer proselitismo político. Según la ONG, Espacio Público, el gobierno controla 49% de los medios audiovisuales. Unos seis canales de televisión, y 200 emisoras de radio, se volcaron a informar sobre los logros de la "revolución". 

 Las diversas alocuciones presidenciales, informaron sobre los “méritos” de su gestión y sobre la necesidad de continuarla; a pesar de que la Constitución Bolivariana, establece la alternabilidad en el poder. 

Laura S.Leret”



Estas críticas ya sostienen por sí mismas lo que quiere un sector de la burguesía venezolana: acabar con las conquistas sociales cuando Capriles tome el poder. En este caso concreto la autora  que decía luchar aquí por una “República de Trabajadores” mientras que en su país  (Venezuela), a golpe de machete, acababa apoyando a los empresarios en el poder.

El proceso por el que vive Venezuela de Revolución y Contrarrevolución es muy parecido al de la II República Española. Por un lado los sectores que quieren mantener sus privilegios y por otro la clase obrera que intenta conseguir sus máximas aspiraciones. Nosotros tenemos una postura de defensa crítica del proceso. Como hemos indicado antes, las conquistas han servido para reforzar la alternativa al sistema que nos excluye. Pero este proceso no hay que mantenerlo simplemente, hay que profundizarlo.

Hay que poner bajo control obrero todas las empresas de alimentación y transporte de mercancías. Centralizar ese control a través de un Estado Obrero y expropiar, bajo control democrático de los trabajadores, el resto de los canales de información. Si los trabajadores, por medio del derecho a la libertad de expresión que  los empresarios sólo utilizan por miedo a perderlo todo mientras agreden con fuerza cualquier protesta obrera;  pueden gestionar sus propios periódicos y la información ¿qué necesidad habría de medios privados de información? ¿qué necesidad habría de “velar por el derecho a la libertad de expresión”? El problema es que los mismos que utilizan los medios antidemocráticos para destruir a la revolución no respetando mayorías y obteniendo financiación de EEUU; no saben vivir de otra forma sin subyugarse a los medios privados.

Lo peor es que, ante toda esta situación, algunas organizaciones “alternativas” como “El Viejo Topo” han permitido escribir a estos autores alimentando el oportunismo. Suponemos que si una organización tan veterana del movimiento ha cometido este “error”, debemos suponer que otras muchas también. Por ello hay que insistir en denunciar el oportunismo allí donde se comete.

Por ello hacemos esta carta abierta a todas las organizaciones de la izquierda comprometidas realmente con la Revolución Venezolana con el objetivo de:

1)      Extender la movilización en el Estado Español de ocupación de fábricas cerradas o que vayan a cerrar.

2)      ¡Ningún Capriles ni en Venezuela ni en España! Informar de lo que realmente ocurre en Venezuela.

3)      No alimentar el oportunismo de los oportunistas en esta cuestión ni en cualquier otra.

4)      Crítica sí, revolucionaria. La crítica y el debate siempre han estado presentes en el movimiento obrero, pero dicha crítica entre diferentes concepciones no ha sido en defensa de posiciones reaccionarias. 


Ascensión Leret


Manuel Rodríguez Leret

domingo, 2 de junio de 2013

ACERCA DE LOS MÉTODOS EN LA MEMORIA HISTÓRICA


Tras 30 años sin dictadura fascista, pero siempre con el resguardo de la misma en esta “democracia”, algunos con el uso de métodos antidemocráticos y sin pruebas nos acusan de “calumnias”, “insultos”, etc... Nosotros hemos centrado nuestras críticas en lo que nos concierne como familiares de Virgilio Leret: la verdad de los hechos.
 Algunos llegan aún más lejos. En el blog “El Alminar de Melilla” comentan:

 Las cosas que fueron escritas hace tanto tiempo, ya han sido juzgadas por la historia. Como dijera Azaña: los muertos ya no tienen rencor. Lo preocupante, es el grado de beligerancia que muestra todavía esa parte de la familia Rodríguez Leret, y la ausencia de reconocimiento a las víctimas de Franco.
Gracias a Carlota Leret, la memoria de su padre, Virgilio Leret , ya está en donde debe y le corresponde. Eso es lo que importa.
 
Sí. Beligerancia con quien miente. Beligerancia contra quien, de forma oportunista, ha desembarcado contando mentiras. De igual forma que mostramos beligerancia contra los fascistas.

Sin embargo, para estos “tertulianos” no es beligerancia usar los medios a su disposición para contradecir a los que, también,  familiares de Virgilio y escucharon a sus hermanos. No es beligerancia, para ellos, seguir presentando algo que está siendo cuestionado por las pruebas presentadas.

Tampoco es beligerancia, a su entender eliminar el derecho de libertad de expresión con su supuesta “tolerancia”:

Tienen derecho a contar su propia historia, pero en el lugar del que son propietarios. En El Alminar ya les hemos tolerado bastante.

 No es beligerancia, para ellos, aliarse con los enemigos de la clase obrera para crear “su república” sin contar con las necesidades de la mayoría. No es beligerancia, para ellos, aceptar que AENA y otras empresas que no se interesan ni lo más mínimo por esta cuestión estén usando su poder económico para hacer que la Memoria Histórica tenga el discurso de los empresarios. Sí, ese discurso de la República abstracta e inexistente que no tiene en cuenta ni las soluciones a esta crisis ni las reivindicaciones de los trabajadores.



Todo esto, y mucha más documentación, está en nuestro blog http://www.lerethispania.blogspot.com.es/. No lo escribimos por tener una propiedad virtual, lo escribimos porque es; por el momento; una forma de difundir esta información frente a la mentira tan bien cuidada por algunos.
Tenemos que decir que aún hay más documentación por presentar.
 Nosotros no hemos acudido a ninguna instancia judicial ni lo haremos por el momento. Creemos que aquí no tienen que entrar ninguna instancia externa, por el momento, a resolver cuestiones que se pueden debatir y exponer. ¿Por qué hay más miedo a ese debate que a una denuncia judicial? ¿Por qué hay miedo a qué conozcan cuales son los intereses de algunos de los que hoy han dirigido la Memoria Histórica? Esta claro que en esa batalla ganaremos enemigos; pero también muchos más aliados. No denostamos la lucha de la Memoria Histórica. Denostamos las mentiras y medias verdades que empañan su actividad.

Los insultos, que a continuación publicamos, demuestra el enfado de ciertos sectores a nuestra aparición. ¿Por qué no quieren rectificar y resolverlo? ¿Hay tanto carisma y ganancia en juego? Sabemos que en los sectores honestos y revolucionarios, que son la mayoría, de la Memoria Histórica ya está habiendo debates sobre el análisis, los métodos y la táctica a aplicar. Eso es positivo. Lo que es negativo son los insultos y que no se quieran reconocer las cosas con las pruebas en la mano. Las presentaremos en su día.

 La memoria de Virgilio Leret no está donde le corresponde. Los “tertulianos” la han intentado envilecer, adaptando su figura ante la perspectiva de una III República burguesa que no solucionaría las condiciones de vida de la clase obrera. Virgilio quería una República, sí, pero de las soluciones a las dificultades de los trabajadores. ¡Una República Socialista!
¡Envilecer figuras revolucionarias! ¡Eso sí que es beligerancia! Y si no se ha reconocido aún a las víctimas del franquismo es debido a la falta de una dirección que sepa encauzar el movimiento. Que sepa encauzar la gran fuerza de ese río. Ese río no se encauza, solamente, con actos en los locales y menos con lecturas de grandes y ricos poemas. ¡Ese río se encauza uniendo las grandes luchas de este momento!

El problema de la vivienda, la sanidad, la educación... no son problemas nuevos. Son problemas que llevamos arrastrando durante años, problemas que no solucionará el capitalismo. La experiencia que puede dar la Memoria Histórica, además de la gran labor de reconocimiento de todos los revolucionarios (famosos o no) que cayeron en los años 30, es analizar cuales fueron las soluciones y cuales de las mismas se pueden poner ahora encima de la mesa.

Si se analiza y se exporta lo mejor, dejando a un lado los errores, estaremos ante un futuro de grandes luchas por el reconocimiento de los fusilados. El tiempo de la mentira y el olvido ha terminado, los tiempos de revoluciones y convulsiones sociales ha llegado.


Firmado Ascensión Leret